jueves, 12 de agosto de 2010

Diario de un currante 2

Holita a todos

Sigo con el post del currante que empece hace un par de semanas. Estando en plenas fiestas del pueblo, por fin puedo sentarme y actualizar.

En fin, que poco a poco voy haciéndome con el trabajo, con todo lo que debo tener en cuenta en cada situación. Los usuarios del gimnasio del polideportivo van ayudándome y van comentndome cosas. Después de tantos años entrenandose allí, ya saben más sobre el lugar que cualquier monitor que haya trabajado allí antes.

Llegado el segundo día, uno de ellos me comenta: "Los días de mucha lluvia, ojo. El polideportivo se inunda que es cosa fina, tanto por la parte del gimnasio como por la del campo de fútbol". Casi me santiguo para no llegara ese día.

2 días después, llega. Un chaparrón como no se había visto allí en años y años según habitantes del pueblo, periódico y televisión se cierne sobre mi lugar de trabajo. Lluvia,viento, relámpagos,truenos y granizo hacen que el polideportivo cruja, y del ruido temo que caiga el techo sobre mi cabeza. De repente me doy cuenta que el gimnasio se está inundando, debido a que entra agua por las ventanas(situadas a casi 3 metros de altura)debido a un canalón roto. Y el campo del fútbol sala también se inunda. Y la entrada por el patio del colegio tambien. Estoy solo. Horror.

Decido ir primero a por el gimnasio y dejar el resto para más tarde. Total, hay máquinas que pueden estropearse debido al agua y el granizo. Cojo unas escaleras de mano, y subo para cerrar las ventanas y evitar que entre más agua. El granizo y la lluvia me golpea la cara mientras trato de hacer fuerza para cerrarlas. Lo consigo. Voy a encender los focos del polideportivo para estar mejor iluminado. Al ir a accionar el interruptor, me doy cuenta que está empaado, y uno de sus cables sale por la ventana, atravesando una cascada (literal) el agua que entra. Para quedarse frito allí mismo. Me arriesgo y enciendo las luces. Sin perder tiempo, saco cubo y fregona, y empiezo a recoger el agua que ha entrado, sala por sala. Hay goteras.

En fin, decir que todo acabó bien, y llené 15 cubos de fregar enteros.¿Como es posible que no puedan arreglar un simple canalón de agua o unas goteras? Cuando yo me vaya, le tocará prongar al otro. Tengo la esperanza de que ahora que he dado p
En fin, la dura vida del currante.